Música para acompañar la lectura


viernes, 20 de julio de 2012

Dos grandes errores de la humanidad


Las cosas del diario vivir te enseñan lecciones de vida en cada minuto que avanza del día. Este último tiempo  la chica ha aprendido que hay dos grandes errores que comete a menudo la humanidad, el primero y más doloroso es esperar demasiado de quienes la rodean. 
Siempre se espera escuchar algo que se necesita oír en esos precisos minutos que son imprescindibles las palabras para seguir avanzando,  que se actúe de una determinada manera frente a un acontecimiento específico, ser acompañados por ciertas personas en momentos y cosas importantes o que simplemente se quiere compartir con ellas, que den respuestas de manera diferente a la que te están respondiendo frente a una interrogante, entre muchas otras cosas.
Pero los minutos que componen las horas del día , los actos que forman la convivencia diaria con el mundo y el entorno le demuestran que cada día la sociedad se vuelve más egoísta, que no hay nada que importe más que el bienestar y desarrollo propio, pensando equivocadamente que nadie depende de nadie o que jamás se necesitará de el de al lado, es aquí donde aparece el segundo gran error, ya que si todos se dedicaran a frenar un poco sus vidas, que avanzan cada vez más a la velocidad de la luz, se darían cuenta y se llegaría a la conclusión ,de que el ser humano para vivir no lo puede hacer de forma solitaria e individualista  sino que de manera social... Para comprar, necesitas de quien te atienda, para utilizar la luz, dependes de quien te brinde el servicio eléctrico,, para estudiar y desarrollar lo cognitivo, educativo y profesional necesitas de un profesor que te enseñe, para trabajar, muchas veces , se necesita de un superior que te guíe y así sucesivamente, nunca se depende totalmente de sí mismo, pero a veces en esta sociedad se olvidan esas simples cosas y se piensa que cada quien debe vivir la vida de manera egoísta y personal sin necesidad de agradecimientos o simples demostraciones afectivas que ayudan al desarrollo psico-emocional de las personas.
Se comienzan a valorar cosas y personas que te gustaría tener cerca pero que están lejos, no de manera física, sino como ser de compañía, amistad o hermandad,  mientras poco a poco pierdes a la gente que verdaderamente está a tu lado de manera incondicional, sin darte cuenta, porque simplemente estás segura que están y se quedarán allí, pero te niegas a verlas, entre más cerca se vuelven más invisible para ti.


Por eso hoy los invito a detenerse un segundo en el correr diario que demanda la vida, miren a su alrededor y dense cuenta de lo que tienen, y por último de que la vida no está hecha para vivirla de manera solitaria sino en sociedad, pero aprendan a encajar y ubicarse en una sociedad  y  con un alrededor que valga la pena  considerar, cuidar y que los acompañe a disfrutar de los goces que les regala cada día la vida.